Introducción
Más de 2,5
millones de personas, sólo en España, sufren de problemas relacionados con la
movilidad. Y cerca de 500.000 niños en el mundo sufren de una enfermedad llamada atrofia muscular espinal (AME). Para todos
ellos, la solución para poder andar es el exoesqueleto.
El
exoesqueleto es una especie de robot que se acopla al tronco y a las piernas de la persona
por medio de unos soportes y con
unos motores que lo hacen funcionar.
Datos y resultados
En 2009 la
ingeniera industrial y doctora en robótica
del CSIC, Elena García , comenzó su proyecto para la creación de un
exoesqueleto biónico pediátrico al
conocer a Daniela, que tenía 6 años y que, a consecuencia de un accidente de
tráfico , se había quedado tetrapléjica.
Dos años
después, Daniela se enfundó el Atlas 2020, se levantó de su
silla y dio unos pasos. Aquel robot se convirtió en el primer modelo pediátrico
de exoesqueleto biónico.
Existen otros
modelos pensados y diseñados para ayudar a las personas adultas: Exolegs y
Rewalk. Para ambos los usuarios deben tener control torácico y fuerza en los brazos para llevar
muletas.
En la actualidad
Daniela no puede utilizar el exoesqueleto pediátrico porque va creciendo. Los
niños a los que el exoesqueleto puede ayudar tendrían entre 3 y 14 años,
principalmente con la enfermedad AME. Con él se pondrían poner de pie desde su
sillita de ruedas y andar para conseguir una mejor calidad de vida, autonomía e
independencia, según la doctora en robótica Elena García.
Bibliografía
Periódico El
País 2 Febrero 2015
Antena 3 tv
Daniela Cabrera